El 25 de octubre se votará por el Apruebo o Rechazo de una nueva Constitución. Aquí los procesos a seguir después de eso.
El domingo 25 de octubre se llevará a cabo un nuevo plebiscito en nuestro país, esta vez, para que la ciudadanía elija el destino de la actual Constitución Chilena. Los votantes tendrán que decidir si aprobar el camino hacia la redacción de una nueva Constitución o bien rechazarlo.
De esa manera, todos los chilenos que no estén en una cuarentena obligatoria por ser un caso de Covid-19 positivo, podrán asistir a las urnas para dejar su sufragio.
En la papeleta se deberá dejar la preferencia por dos preguntas. La primera, por el Apruebo o Rechazo de una Nueva Constitución y la segunda, si el camino a redactar una nueva Carta Magna tiene que ser vía Convención Mixta Constitucional o Convención Constitucional.
¿Qué pasa si gana la opción Rechazo?
En este caso, permanece la Constitución de 1980 y no se elabora una nueva.
¿Qué pasa si gana el Apruebo?
Si los resultados dan como mayoría la opción Apruebo una nueva constitución, entonces se iniciará el proceso para reemplazar la Carta Magna. Este proceso se realizará mediante una Convención Constitucional o una Convención Mixta Constitucional.
El primer caso, también conocido como Convención Constituyente, corresponde a un proceso desarrollado por 155 miembros que serán 100% electos por la ciudadanía el 11 de abril de 2021.
En el segundo caso, el proceso será desarrollado de manera mixta por parlamentarios y ciudadanos. En total serán 172 los integrantes (86 parlamentarios y 86 ciudadanos electos para este efecto). Las elecciones de ciudadanos también serán el 11 de abril del 2021, junto a la elección de alcaldes y gobernadores regionales.
Quien elige a los parlamentarios que pasarán a ser parte del proceso será el actual Congreso.
Una vez elegido el proceso, las personas designadas tendrán un plazo de hasta nueve meses para redactar una nueva Constitución desde cero. Este plazo que podrá ser prorrogado una sola vez y por tres meses más.
En el proceso de esa redacción cada decisión deberá contar con el acuerdo de al menos dos tercios de sus integrantes. Si hay un ítem que no genere esa mayoría, entonces ese ítem quedará fuera del texto constitucional.
Una vez elaborado el texto, este será sometido a un nuevo plebiscito (también conocido como ratificatorio o de salida) donde el voto será obligatorio.
¿Qué pasa si en el plebiscito de salida gana el rechazo?
Continuará vigente la Constitución de 1980.
Fuente: rockandpop.cl
María Ignacia Inostroza